PIRÁMIDE

La queja interpuesta por el dirigente nacional de MORENA, Andrés Manuel López Obrador, ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) por el estado represivo bajo el que se rige Puebla es para el senador del Partido Acción Nacional (PAN), Javier Lozano Alarcón, una miedosa provocación.

 

Para el representante blanquiazul, el líder de izquierda es un ejemplo de “NiNi”, pues afirma que lleva desde el 2005 recorriendo el país sin un trabajo fijo que respalde los gastos de sus giras. En la conferencia de prensa también afirmó que “la estrategia de desprestigio de López Obrador es porque ve a Rafael Moreno Valle como un posible rival presidencial”.

 

Habló de la inminente fuerza política del gobernador poblano así como de la situación de los presos políticos en el estado, negando que en la entidad existan estos, y por el contrario, enalteciendo por parte de la administración el buen uso de ley. Según sus declaraciones, quienes están en la cárcel haciéndose mártires son unos “delincuentes vulgares”.

 

La denuncia que realizó el “Peje” junto con un grupo de legisladores como es el caso de Manuel Bartlett y Ricardo Monreal, fue minimizada por Lozano, tachando el ejercicio de demagógico: “estoy seguro que la CNDH va a llegar a al conclusión de que no hay presos políticos… ¡Qué presos políticos ni que ocho cuartos!”. De igual forma, inculpó a López Obrador de ser el principal manipulador de los movimientos sociales, incluyendo el plantón que realiza la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) en la capital.

 

El panista respaldó la gran labor tanto de Moreno Valle como la del alcalde José Antonio Gali Fyad a un año de haber entrado a la presidencia municipal de Puebla, y de quien dijo “estar haciendo bien las cosas en perfecta sintonía y relación con el gobierno estatal”.

 

Antes de finalizar su mitin, Lozano dejó en claro que, luego de los señalamientos, las diferencias públicas con el líder nacional del PAN, Gustavo Madero Muños, son cosa del pasado. Apuntó que Madero, incluso, lo invitó a tomarse un café para platicar, encuentro que aún no se ha dado pero que se dará.